La ropa indecorosa y las joyas caras

La ropa indecorosa y los atavío caros
por Edwin Mauricio Alza

Pablo manda a toda mujer que obedece la fe a vestirse con ropa decorosa, decente, honesta. La mujer cristiana tiene pudor, vergüenza y recato, la creyente no es impúdica. Toda ropa que deja al descubierto las partes menos decorosas (senos, muslos)  o las que forman parte de lo íntimo es ropa inmoral.
Pero no sólo se trata de descubrir la piel de las partes menos pudorosas, también se trata de ceñirlas específicamente.

La mayoría de pantalones que usan la mujeres hoy son muy ceñidos y dibujan su figura, lo que constituye desnudez. Alguien bromeaba de que un viejo Apache decía que las mujeres pertenecían a la tribu "pellejo azul" debido al blue jean.

La renovación del entendimiento hace ver que eso no conviene a mujeres que profesan consagración al Dios Único y Verdadero.

LBLA Asimismo, que las mujeres se vistan con ropa decorosa, con pudor y modestia, no con peinado ostentoso, no con oro, o perlas, o vestidos costosos;

DHH Y quiero que las mujeres se vistan decentemente, que se adornen con modestia y sencillez, no con peinados exagerados, ni con oro, perlas o vestidos costosos.

JBS Asimismo también las mujeres, ataviándose de manera honesta, con pudor y modestia; no con peinado ostentoso, u oro, o perlas, o vestidos costosos,

NBD En cuanto a las mujeres, quiero que ellas se vistan decorosamente, con modestia y recato, sin peinados ostentosos, ni oro, ni perlas ni vestidos costosos.

NBLH Asimismo, que las mujeres se vistan con ropa decorosa, con pudor y modestia, no con peinado ostentoso, no con oro, o perlas, o vestidos costosos,

NTV Y quiero que las mujeres se vistan de una manera modesta. Deberían llevar ropa decente y apropiada y no llamar la atención con la manera en que se arreglan el cabello ni con accesorios de oro ni con perlas ni ropa costosa.

NVI En cuanto a las mujeres, quiero que ellas se vistan decorosamente, con modestia y recato, sin peinados ostentosos, ni oro, ni perlas ni vestidos costosos.

CST En cuanto a las mujeres, quiero que ellas se vistan decorosamente, con modestia y recato, sin peinados ostentosos, ni oro, ni perlas ni vestidos costosos.

PDT A su vez, quiero que las mujeres se vistan con modestia, con respeto hacia los demás y con decencia. No se adornen con peinados exagerados, ni oro, ni perlas, ni ropa costosa,

BLP De manera semejante, que las mujeres se contenten con un vestido decoroso, que se adornen con recato y modestia, no con peinados artificiosos, ni con oro, joyas o vestidos costosos.

BLPH De manera semejante, que las mujeres se contenten con un vestido decoroso, que se adornen con recato y modestia, no con peinados artificiosos, ni con oro, joyas o vestidos costosos.

RVR1960 Asimismo que las mujeres se atavíen de ropa decorosa, con pudor y modestia; no con peinado ostentoso, ni oro, ni perlas, ni

RVA Asimismo también las mujeres, ataviándose en hábito honesto, con vergüenza y modestia; no con cabellos encrespados, u oro, ó perlas, ó vestidos costosos.

SRV-BRG Asimismo también las mujeres, ataviándose en hábito honesto, con vergüenza y modestia; no con cabellos encrespados, u oro, ó perlas, ó vestidos costosos.

TLA También deseo que las mujeres se vistan con sencillez, decencia y modestia. Que no usen peinados exagerados, ni joyas de oro o adornos de perlas ni ropa muy cara.

En cuanto a las joyas que es otra forma de atavío (la ropa lo es) lo que está prohibido es el material lujoso o caro con que estén hechas, específicamente si son de oro o piedras preciosas y eso por ser una bofetada a la pobreza del hermano seguidor del Mesías.

Aunque no hay prohibición para otros materiales debemos recordar que la cristiana está llamada a ser sobria, modesta y sencilla. Luego no debe vivir para maquillarse ni debe colgarse cuanta cosa le sugiera el mundo de vanidad.